La endodoncia, vulgarmente conocida como “matar el nervio”, consiste en limpiar la muela por dentro eliminando los restos de bacterias, sangre, y tejidos inflamados o infectados que quedan después de que se hayan dañado. Su finalidad es preservar la salud e integridad de la pieza dental para mantener la dentición natural, el hueso y la encía que la rodea, así como su funcionalidad.
La causa más frecuente para tener que realizar una endodoncia es la presencia de caries que llegan al nervio, produciendo dolor, infección, flemón o fístula, aunque también puede ser por otras causas como traumatismos, cambios bruscos de temperatura, fisuras, problemas periodontales…
La endodoncia consiste en realizar una pequeña apertura por la que accedemos con diferentes instrumentos para limpiar y desinfectar toda la pieza dental por dentro, para luego poder sellarla adecuadamente impidiendo el paso de bacterias y suciedad al interior, y dando la estructura necesaria para poder colocar una corona, incrustación o reconstrucción según sea necesario en cada caso para poder salvar la pieza, que aunque desde este momento no tendrá sensibilidad (no notarás el frío o el calor con ella), si podrás utilizarla para masticar y sonreír sin ningún tipo de problemas y lo más importante, mantendrás en boca una pieza tuya que siempre será mejor que cualquier tipo de prótesis o implante.
Es importante que este tipo de tratamientos lo realice un especialista, el endodoncia, ya que es una técnica complicada que requiere de un gran entrenamiento para conseguir buenos resultados, además de ser necesarios unos medios técnicos de vanguardia.
En nuestra clínica contamos con una de las herramientas más importantes y novedosas para realizar esta especialidad, un microscopio dental, el cual nos permite tener una imagen nítida del interior del diente, de forma que nos permita tanto una evaluación del caso más adecuada, como a la hora de realizar el tratamiento poder hacerlo de una forma mucho más conservadora y fiable, dando lugar a resultados mucho más predecibles.
En nuestra clínica, la Dra. Diana Lanseros cuenta con la titulación de máster en endodoncia microscópica además de varios expertos y diplomas en la materia, así como un microscopio dental y los motores más avanzados en endodoncia rotatoria y sellado con sistemas de gutapercha termoplástica, para poder asegurarnos de conseguir el mejor resultado en nuestros
tratamientos.
Tipos de tratamientos endodónticos
Endodoncia unirradicular
Tratan aquellas piezas con un solo canal radicular, generalmente los incisivos y caninos. Aunque, los incisivos y caninos inferiores suelen presentar dos conductos radiculares.
Endodoncia birradicular
Tratamiento que se realiza en los dientes que poseen dos canales radiculares, como por ejemplo, los premolares.
Endodoncia multirradicular
Se lleva a cabo en molares, ya que pueden presentar tres, cuatro o hasta cinco conductos radiculares.
Reendodoncia
Se realiza este tratamiento en aquellas piezas dentarias a las que previamente se les había realizado una endodoncia, pero que por diferentes causas se vuelven a reinfectar causando un proceso infeccioso que puede provocar, o no, dolor o molestias en la pieza o zona afectada.
Cirugía periapical o Apicectomía
Está indicada en aquellos casos en los que hay que acceder tras una endodoncia previa, de forma quirúrgica al extremo de la raíz del diente para poder solventar la patología que presenta.